La pandemia por COVID-19 ha venido a cambiar todo lo que dábamos por hecho. Como si el calentamiento global y la destrucción de ecosistemas no fuera suficiente, el coronavirus nos ha mostrado la necesidad de hacer las cosas diferentes, con el fin de mejorar nuestra relación con la naturaleza, los demás seres vivos y nuestros más de 7,000 millones de compañeros en el planeta Tierra.
En estos últimos meses, el turismo se ha estado innovando más que nunca y lo que nos parecía extraño cada vez se vuelve más normal. En el mundo del turismo existen mil y una variantes, clasificaciones, tipologías de lo que podríamos resumir simplemente como “desplazarse a un lugar que no es tu entorno habitual de residencia”. Existen tipos de turismo para todos los gustos y colores, tal vez ya conoces algunos como el de sol y playa, de negocios, etcétera, cada uno con sus ventajas y desventajas para los que lo practican, y especialmente, para los anfitriones. Seguramente puedes imaginar algunos de los problemas de recibir grandes cantidades de turistas, tanto para el ambiente como para las sociedades, por lo que no hace falta que te los mencionemos.
Hoy queremos hablarte de una forma de viajar que tal vez no te sea tan conocida y que representa una alternativa para viajar de manera más responsable: el turismo comunitario.
El turismo comunitario se practica en contextos rurales o indígenas y su fin último es mejorar las condiciones de vida de las comunidades locales. En estos proyectos, los miembros de la comunidad son los responsables de la planificación, operación y gestión de los proyectos turísticos; así como de la distribución de los beneficios derivados de la actividad turística.
Creemos en el turismo comunitario porque, para los socios, es una forma de obtener ingresos complementarios sin abandonar sus actividades cotidianas, aprovechando, preservando y revalorizando la cultura y los recursos naturales de su entorno. Todo esto contribuye a la economía local y finalmente es una herramienta de empoderamiento para que las comunidades se apropien de sus recursos.
Recorrido de apiturismo en Sinanché. Baño de arcilla en Río Lagartos. Recorrido en bici en Cenotillo.
Como ves, este tipo de turismo tiene beneficios para las comunidades anfitrionas, pero también tiene beneficios para quienes lo practican, especialmente en esta época de pandemia. A continuación, te mostramos una serie de razones por las que el turismo comunitario es una buena opción para tus siguientes viajes:
1. Tienes contacto con la naturaleza
Como te decíamos, el turismo comunitario se conoce por realizarse en zonas rurales o indígenas, las cuales están rodeadas por un entorno rico en vegetación, con menor impacto de la urbanización. Así, en las actividades de turismo comunitario podrás disfrutar de la naturaleza responsablemente, visitando espacios naturales amplios y sin gran cantidad de personas a tu alrededor, perfecto para mantener la sana distancia.
2. Apoyas a la economía local
Ya que las actividades son operadas por las mismas organizaciones locales y las actividades muchas veces involucran a varias personas de la comunidad, los ingresos se reparten de manera más equitativa y llegan a más personas. Te recomendamos consumir o comprar productos fabricados por los habitantes de los lugares que visitas.
3. Conoces lugares únicos y poco comunes
Gran parte de los sitios que se visitan al practicar este tipo de turismo están alejados de las ciudades, por lo que son menos conocidos y llegan pocos visitantes. Por lo que, además de que podrás disfrutar de los lugares a tu ritmo, también hay menos riesgo de contagiarse, sin olvidar que nuestras cooperativas también aplican medidas de higiene. Al mismo tiempo, podrás disfrutar nuevas experiencias y tener gratos recuerdos de nuevos paisajes.
4. Se viaja en grupos pequeños
Los viajes son normalmente en pequeños grupos para no rebasar la carga máxima de capacidad del sitio y así no afectar a la conservación de este. Asimismo, esto les permite a las comunidades anfitrionas ofrecer un mejor servicio y tú podrás vivir una experiencia más personalizada.
5. Experimentas nuevas vivencias, tradiciones y costumbres
Como el turismo comunitario se realiza alrededor de actividades diarias o representativas de las comunidades, podrás conocer la identidad y costumbres de una población junto a los locales, la mejor manera de aprender sobre la cultura de los lugares que visitas.
Estos puntos solamente fueron algunas de las razones por la que practicar el turismo comunitario es una magnífica idea, pero seguramente encontrarás más al vivirlo tú mismo. ¿Te animas? Consulta aquí todo lo que puedes hacer con nosotros mientras redescubres Yucatán desde una perspectiva local.
Escrito por: Jan Martín Müller y Karime Reyes Chin.